UACM
COMUNICADO DEL MTRO. JOSÉ REMUS GALVÁN, COORDINADOR DEL PLANTEL DEL VALLE SOBRE LOS SUCESOS DEL VIERNES 6 DE MARZO DE 2009 EN EL PLANTEL.
Cerca de las 10 p.m. del viernes 6 de marzo, habiendo sólo dos grupos en clase (Dr. Hassán Dalband—Actores Sociales, en la terraza; y el Mtro. Gilberto Alvide en Est. Sociales e Históricos), el alumno Juan Manuel Salazar se retiró de la clase del Dr. Dalband unos minutos antes de terminar la clase; se dirigió hacia su motocicleta, que la estaciona en la banqueta, afuera de la entrada del plantel. Al tratar de abordarla intentaron detenerlo dos policías, uno de ellos vestido de civil con una camiseta y otro uniformado con chaleco antibalas y pistola en mano. Juan Manuel regresó al plantel y cerró la puerta, la cual fue abierta a la fuerza por los policías, quienes lo persiguieron. El policía vestido de civil lo sujetó y lo zarandeó; el otro le ordenó tirarse al piso E HIZO DOS DETONACIONES AL AIRE CON SU PISTOLA. Al escucharlas, el Dr. Dalband bajó con sus alumnos al patio y, junto con los policías de vigilancia de la UACM (que no están armados), les exigió que soltaran a Víctor Manuel y les reclamó airadamente su intervención violenta e intimidatoria. Exigieron que estuvieran presentes los jefes responsables de los policías; mientras, tomaron nota de los hechos y de todos los nombres, tanto de los actuantes como de los estudiantes testigos.
Mientras tanto fuimos avisados la Mtra. Teresa Palao, Encargada del despacho del Abogado Gral. de la Universidad, y un servidor. En un lapso de unos 20 a 30 minutos nos presentamos en el plantel; yo les reclamé la irrupción en una institución educativa AUTÓNOMA, y sin tener alguna orden de aprehensión. La Mtra. Palao acudió con varios abogados de su equipo, que se encontraban reunidos analizando las negociaciones del Contrato Colectivo de Trabajo. Dos de ellos son penalistas con buena experiencia en la materia, lo cual ayudó en la difícil y tensa situación. También se presentó el Lic. Aguilar, Enlace Administrativo, que en todo momento ayudó. Afuera había patrullas y camionetas de la policía.
El Rector fue informado de todos los pasos que se iban dando.
Según “explicaron” los policías, había el reporte de que esa moto era robada y por eso querían detener al alumno Salazar. La Mtra. Palao hizo ver todas las irregularidades y exigieron que fuéramos todos al Ministerio Público; los compañeros del estudiante también nos acompañaron. Los jefes de sector de la policía indicaron que nos trasladáramos todos a la 8ª. Agencia del M.P., sita en Cuauhtémoc y Obrero Mundial. Allí el estudiante, asesorado por sus familiares, mostró los papeles que acreditaban la propiedad de su vehículo (que levanta la sospecha que en realidad buscaban quitársela). Ese asunto quedó en manos del estudiante, pues según instruyó la Mtra. Palao, era en el fondo un asunto particular, y se concentró en “el allanamiento de morada y abuso de autoridad”. A las 5 de la mañana el M.P. les tomó la declaración a los abogados de la Universidad.
A las 11 a.m. del sábado 7, se presentaron en el plantel los peritos de la Procuraduría a realizar el peritaje y recoger los casquillos de bala. Aun están pendientes declaraciones y otras diligencias—los estudiantes no serán llamados a declarar, según ha explicado la Mtra. Palao. Mientras tanto, los dos policías siguen en proceso libres bajo fianza.
CONCLUSIONES:
1) La rápida reacción del profesor Dalband muestra las enseñanzas de la defensa de los derechos humanos—Programa al cual está adscrito el prof. Dalband--, de que se debe actuar rápidamente para evitar que la situación se degrade, como hubiera sido el hecho de que se hubieran llevado detenido al estudiante. Es algo que hay que agradecer al profesor.
2) Se están estudiando medidas que refuercen la seguridad en el plantel, que sean prácticas, no generen un ‘ambiente de paranoia’, pero que sean efectivas. Esto expuse en el Consejo Interino del Plantel. Por ejemplo, eliminar las bandas horarias les crearía un problema a los estudiantes que por razones de trabajo sólo pueden acudir al turno de la noche. Pero sí tal vez cerrar las puertas a las 8 p.m. y sólo permitir la entrada a quienes se identifiquen y justifiquen su acceso. También que hubiera una camioneta que trasladara a los alumnos a la estación del Metro, etc.
En cuanto se encuentre la solución idónea, habiendo consultado al Rector y al jurídico, a la Coordinación de Servicios Administrativos, etc., se comunicará al Consejo Interino y a toda la Comunidad.
Atentamente,
MTRO. JOSÉ REMUS GALVÁN
COORDINADOR DEL PLANTEL DEL VALLE
11 de marzo de 2009.
COMUNICADO DEL MTRO. JOSÉ REMUS GALVÁN, COORDINADOR DEL PLANTEL DEL VALLE SOBRE LOS SUCESOS DEL VIERNES 6 DE MARZO DE 2009 EN EL PLANTEL.
Cerca de las 10 p.m. del viernes 6 de marzo, habiendo sólo dos grupos en clase (Dr. Hassán Dalband—Actores Sociales, en la terraza; y el Mtro. Gilberto Alvide en Est. Sociales e Históricos), el alumno Juan Manuel Salazar se retiró de la clase del Dr. Dalband unos minutos antes de terminar la clase; se dirigió hacia su motocicleta, que la estaciona en la banqueta, afuera de la entrada del plantel. Al tratar de abordarla intentaron detenerlo dos policías, uno de ellos vestido de civil con una camiseta y otro uniformado con chaleco antibalas y pistola en mano. Juan Manuel regresó al plantel y cerró la puerta, la cual fue abierta a la fuerza por los policías, quienes lo persiguieron. El policía vestido de civil lo sujetó y lo zarandeó; el otro le ordenó tirarse al piso E HIZO DOS DETONACIONES AL AIRE CON SU PISTOLA. Al escucharlas, el Dr. Dalband bajó con sus alumnos al patio y, junto con los policías de vigilancia de la UACM (que no están armados), les exigió que soltaran a Víctor Manuel y les reclamó airadamente su intervención violenta e intimidatoria. Exigieron que estuvieran presentes los jefes responsables de los policías; mientras, tomaron nota de los hechos y de todos los nombres, tanto de los actuantes como de los estudiantes testigos.
Mientras tanto fuimos avisados la Mtra. Teresa Palao, Encargada del despacho del Abogado Gral. de la Universidad, y un servidor. En un lapso de unos 20 a 30 minutos nos presentamos en el plantel; yo les reclamé la irrupción en una institución educativa AUTÓNOMA, y sin tener alguna orden de aprehensión. La Mtra. Palao acudió con varios abogados de su equipo, que se encontraban reunidos analizando las negociaciones del Contrato Colectivo de Trabajo. Dos de ellos son penalistas con buena experiencia en la materia, lo cual ayudó en la difícil y tensa situación. También se presentó el Lic. Aguilar, Enlace Administrativo, que en todo momento ayudó. Afuera había patrullas y camionetas de la policía.
El Rector fue informado de todos los pasos que se iban dando.
Según “explicaron” los policías, había el reporte de que esa moto era robada y por eso querían detener al alumno Salazar. La Mtra. Palao hizo ver todas las irregularidades y exigieron que fuéramos todos al Ministerio Público; los compañeros del estudiante también nos acompañaron. Los jefes de sector de la policía indicaron que nos trasladáramos todos a la 8ª. Agencia del M.P., sita en Cuauhtémoc y Obrero Mundial. Allí el estudiante, asesorado por sus familiares, mostró los papeles que acreditaban la propiedad de su vehículo (que levanta la sospecha que en realidad buscaban quitársela). Ese asunto quedó en manos del estudiante, pues según instruyó la Mtra. Palao, era en el fondo un asunto particular, y se concentró en “el allanamiento de morada y abuso de autoridad”. A las 5 de la mañana el M.P. les tomó la declaración a los abogados de la Universidad.
A las 11 a.m. del sábado 7, se presentaron en el plantel los peritos de la Procuraduría a realizar el peritaje y recoger los casquillos de bala. Aun están pendientes declaraciones y otras diligencias—los estudiantes no serán llamados a declarar, según ha explicado la Mtra. Palao. Mientras tanto, los dos policías siguen en proceso libres bajo fianza.
CONCLUSIONES:
1) La rápida reacción del profesor Dalband muestra las enseñanzas de la defensa de los derechos humanos—Programa al cual está adscrito el prof. Dalband--, de que se debe actuar rápidamente para evitar que la situación se degrade, como hubiera sido el hecho de que se hubieran llevado detenido al estudiante. Es algo que hay que agradecer al profesor.
2) Se están estudiando medidas que refuercen la seguridad en el plantel, que sean prácticas, no generen un ‘ambiente de paranoia’, pero que sean efectivas. Esto expuse en el Consejo Interino del Plantel. Por ejemplo, eliminar las bandas horarias les crearía un problema a los estudiantes que por razones de trabajo sólo pueden acudir al turno de la noche. Pero sí tal vez cerrar las puertas a las 8 p.m. y sólo permitir la entrada a quienes se identifiquen y justifiquen su acceso. También que hubiera una camioneta que trasladara a los alumnos a la estación del Metro, etc.
En cuanto se encuentre la solución idónea, habiendo consultado al Rector y al jurídico, a la Coordinación de Servicios Administrativos, etc., se comunicará al Consejo Interino y a toda la Comunidad.
Atentamente,
MTRO. JOSÉ REMUS GALVÁN
COORDINADOR DEL PLANTEL DEL VALLE
11 de marzo de 2009.
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